Gofres con kéfir casero ¡Facilísimos de hacer!

Hay que aprovechar cuando se está de vacaciones para disfrutar de un buen desayuno tranquilamente, ¿No os parece? De diario (imagino que como todos vosotros) no tengo tiempo para preparar unos gofres o unas tortitas y tomármelos relajadamente ¡Qué más quisiera! 

Pero de vez en cuando viene muy bien darse un capricho, aunque ya sabéis mi "manía" por quitar grasas y azúcares a todo lo que se pueda, así que he modificado un poquito la receta original para hacerlos lo más sanos posibles.

La mayoría de vosotros ya habréis escuchado hablar del kéfir y de sus propiedades pero os recomiendo visitar este enlace de Kefiralia para que conozcáis un poco más sus beneficios que no son pocos.

 Antes de comenzar con la receta, os voy a explicar de la manera más rápida y sencilla posible los pasos que hay que seguir para tener nuestro kéfir casero todos los días.

1_ Lo primero y más importante: Tener los "granulitos" de kéfir para poder fermentar la leche. Los de aquí acaban saliendo muy bien de precio (tened en cuenta que si lo cuidáis es para toda la vida) y son súper pequeñitos porque os mandan los más jóvenes y frescos y 100% tradicionalessin ningún tipo de modificación.

2_ En la imagen 1 veis en la bolsita que vienen y en la imagen 2 es la bolsita que viene dentro de la primera bolsita (¡parece un trabalenguas! jajaja)

3_ Abrimos las bolsitas y con un colador de plástico quitamos la leche que nos viene, no la vamos a utilizar. La cantidad es como una cucharada de granulos que da para un litro de leche.

4_ Ponemos los gránulos en un bote de vidrio de 1 litro de capacidad. Yo puse solo 500ml de leche.

5_ Tapamos con una servilleta plegada y sujetamos con una goma y dejamos en un sitio oscuro entre 24-48 horas (dependerá de la temperatura ambiente, la cantidad de leche y si lo queremos más o menos ácido).

6_ El kéfir ya preparado. Esta foto es de la segunda vez que lo preparé (esta vez con leche entera y el que usé para esta receta) , mucho más reactivos y haciendo un kéfir más espeso!

*Se puede hacer con leches vegetales, solo tenéis que hacer dos de leche vegetal y a la tercera vez ponéis al kéfir con leche animal para que vuelva a coger fuerzas y seguid vosotros con las vegetales, vamos, que también lo quiero probar jeje

Volvemos a repetir el proceso:

- Los granulitos colados después de separarlos del kéfir que ha estado un día fermentando, volvemos a poner más leche y todo igual. ¿Por qué os vuelvo a repetir el proceso? Pues bien, tiene una explicación: En la foto número 5 es la consistencia con leche desnatada y en la 6 con leche entera y se hace mucho más espeso. En estas dos veces he puesto una cucharada de gránulos para unos 350ml de leche, yo lo quería espeso para la receta.
*La etiqueta es para que veáis la garantía con la que nos viene el producto, además de dos hojas muy detalladas de cómo llevarlo a cabo y diferentes recetas.

 Ahora que ya sabemos cómo elaborar nuestro propio kéfir... ¡Vamos con la receta de los gofres!

INGREDIENTES (Salen 12 gofres)

- 2 tazas de harina normal (230gr más o menos)
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de levadura química tipo Royal
- 1 cucharadita de sal
- 3 cucharadas de azúcar (40gr más o menos)
- 3 huevos batidos
- 60gr de mantequilla derretida
- 475ml de kéfir
- Spray, aceite o mantequilla para untar bien el molde

NOTA: Estos no son los típicos gofres belgas que son más crujientes, la masa es levada y tienen azúcar perlado en su interior. Son los típicos americanos más blanditos, de levadura química  y súper rápidos de hacer pero bastante aligerados de calorías. Para mi, los mejores para el desayuno!

PREPARACIÓN

- Ponemos los huevos para batirlos bien, en mi caso en la ka varios minutos para que espumasen.

- Ahora le vertemos la mantequilla derretida y seguimos batiendo varios minutos para que se unan bien. Súper importante este paso! la proteína del huevo con la mantequilla hace que el resultado final sea más esponjoso, no os saltéis el orden o añadáis más ingredientes aquí.

- La gofrera la tendremos que calentar dos o tres minutos antes de que tengamos la masa lista y reposada. Yo enciendo también el horno para que no se vayan enfriando y sacarlos todos calentitos.

- En un cuenco grande ponemos los ingredientes secos: harina, bicarbonato, levadura y sal y mezclamos bien.

- A los huevos con la mantequilla le añadimos el kéfir y a mi me gusta ponerle aquí el azúcar en vez de con los ingredientes secos. Batimos bien.

- Le añadimos los ingredientes secos que teníamos preparados.

- Una vez que tengamos la masa lista. La dejamos reposar tapada con un paño durante unos 5 o 10 minutos. En este momento es cuando voy precalentando el horno y la gofrera.

- Uso la cuchara de hacer bolas de helado y la medida de mi gofrera viene a ser 2 y 1/2. Ya cada uno tiene que ver lo suyo. Lo que es importante es cubrir bien toda la placa pero con cuidado de que no rebose.

- Mi gofrera tarda dos o tres minutos en dejarlos así. Una vez que están así los saco con cuidado y los voy dejando en la rejilla del horno a 100º tapados con papel de aluminio hasta que están todos y podemos servirlos.

Y listos para disfrutar!

Yo los serví con unas grosellas y un poco de sirope de arce, hacen un contraste delicioso.

Pues nada amigos, aquí os dejo la primera receta del año y os deseo lo mejor a todos.
Un beso muy fuerte!